El conjunto del Juego de Pelota descansa sobre la gran plataforma que sostiene a la pirámide y a las otras estructuras. El juego de pelota fue una característica común y marco de un ritual notable practicado entre las sociedades de Mesoamérica. Aquí recibió el nombre de pony-ah o pok ta pok, originado tal vez en el término ppuctal-ppuctal que significa “ponerse en cuclillas varias veces”. En Chichén Itzá existieron unos diez juegos de pelota. El principal es el situado sobre la gran plataforma, considerado también el más grande de Mesoamérica: la cancha mide 146 metros de largo por 36 de ancho y con todo y los dos templos, situados al norte y al sur, 168 de largo por 70 de ancho. El lugar tiene forma de “I” y consta de un corredor central o cancha cubierta de césped, limitado al oriente y al poniente por dos muros verticales, paralelos, de 96 metros de longitud.
Los muros y especie de gradas que se encuentran a ambos lados de la cancha están adornados con bajorrelieve que permiten explicar el significado del juego y hacer notoria una estrecha relación de éste con otros homólogos en la costa del Golfo de México.